El club local colabora con los viticultores para evitar los daños que están causando en las viñas
El Club Deportivo de Caza y Tiro de Utiel acordó ayer dar permiso a cazadores de otros lugares, fuera del municipio, para la caza de conejos en el término municipal como medida para poner freno a la superpoblación que está provocando daños en los viñedos de la Denominación de Origen Utiel-Requena, hasta el punto de poner en peligro la cosecha de uva de esta temporada en algunas zonas. Con esta actuación los responsables del coto de caza de Utiel dan respuesta a una de las peticiones realizadas por los viticultores de la zona, que se incremente el número de escopetas de forma considerable para frenar el avance de los lagomorfos.
El presidente del club, Enrique Giménez, explicó a Levante-EMV que desde ayer todos los cazadores interesados de cualquier punto de la provincia -o de fuera de ella-, en participar en las batidas de caza, pueden solicitarlo en la sociedad, en la federación de caza o por medio de las principales páginas web relacionadas con la caza. Las personas que participen en estas cacerías irán acompañadas de un miembro de la sociedad que los acompañará "en función de los partes de daños que presenten los agricultores afectados", matizó el presidente.
En este sentido Giménez declaró, que desde hace semanas, "los socios del club están cazando a diario por el coto. Aunque en muchas ocasiones lo hacen en zonas donde el problema de los conejos no es grave al no disponer de un parte de daños que les informe cuales son las zonas más afectadas". En cuanto a que los cazadores deban ir acompañados, manifestó "son personas que vienen de fuera y no conocen la zona y también hay que vigilar que usando la excusa del conejo no se de caza a otras especies que es este momento están en periodo de veda". Cabe recordar que al conejo también le afecta esta prohibición, pero los daños que están provocando en el viñedo, desde 2008, aconsejan que no se deje de cazarlos todo el año. Motivo por el que en época de veda la Conselleria de Medio Ambiente expide permisos de caza extraordinarios a los viticultores afectados.
Esfuerzo personal y económico
El presidente hizo hincapié en el esfuerzo "personal" y "económico" que supone esta medida para la sociedad y los asociados. "Hay que pagar a las personas que acompañarán a los cazadores, porque tienen que salir todos los días y la afición se convierte en trabajo". Para los asociados, y más concretamente para los directivos "que después de su trabajo tienen que atender a los agricultores, con el desgate personal que supone enfrentarse a situaciones de tensión. Por eso algunos han dimitido".
Espera que la medida sea efectiva, al menos para parar el crecimiento de la población. Aunque recalcó que a pesar de los permisos especiales no pueden cazar en los 150 metros de afección a ambos lados de la autovía A-3 y el AVE, y menos en la misma infraestructura, que es donde más cantidad de conejos hay y donde han excavado la mayoría de sus madrigueras.
Experiencia piloto
Los viñedos de Fuenterrobles fueron los primeros en ser objetivo de los conejos en 2007. Desde 2008 la sociedad de cazadores realiza batidas durante todos los meses del año con cazadores de la población y de otros lugares a los que les cobra una cantidad simbólica que les ayuda a amortizar los costes de estas expediciones. La experiencia ha sido positiva y les ha permitido frenar en gran medida el incremento de población, y nunca reducirla hasta una cifra considerada como normal. Aunque este año tampoco han podido con el repunte poblacional.
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